Conciliación de la vida profesional y personal

Las personas son la pieza clave de cualquier organización, son la fuerza de trabajo y la que hace posible la actividad, por todo eso estamos viviendo un cambio necesario en la gestión de personas. Donde se ha pasado necesariamente de buscar solo productividad, resultados numéricos, remuneración económica, rígidas jerarquías, control del empleado y una relación basada en el conformismo a realmente hacerle un hueco al trabajador y desarrollarlo como profesional y como persona.

La dirección de los RRHH es lo más apasionante de cualquier empresa. El activo más potente son las personas y desde ahí llevarlas a sacar su mayor rendimiento. Hacer disfrutar a la gente de su trabajo, sacar virtudes que ni ellos mismos saben que tienen, hacer de un trabajo un sitio para explayarte, para estar en confianza, en libertad, donde veas tus ideas válidas y tu función imprescindible. No solo es importante ser profesional en lo que haces, el 80% es ponerle corazón, intención, en definitiva, ganas en lo que inviertes tiempo, que no solo se trate de obtener remuneración económica sino llegar a casa y sentirte satisfecho.

Según el equipo de investigación de redacción de Comisión de Igualdad, Ceoe (2017) la tendencia a la que se enfrenta el mundo actual es la conciliación entre la vida profesional del empleado y su vida personal, que siempre ha estado tintada por un conflicto entre los intereses de la empresa y los intereses del trabajador. Según un informe de Bezzia (2019), la importancia de dicha conciliación genera utilidad en muchos terrenos ya que aporta estabilidad familiar y una mejor cohesión entre sus miembros, reduce el estrés y la ansiedad en el hogar, los padres viven con menos preocupación por la culpa de falta de tiempo, y padres y madres serán más productivos en sus puestos de trabajo entre otras muchas más ventajas.

Es una realidad la cantidad de problemas colaterales en los que ha incurrido la sociedad por este tema y hasta hace muy poco tiempo no se ha abierto debate sobre ello, según un informe de Sodexo (2018) el 90% de los trabajadores no pasa el tiempo deseado con su familia, mientras que un 45% considera que le faltan horas para ocuparse de sus actividades personales. Este desajuste puede provocar distintos problemas de salud en los empleados. El estrés el más conocido de ellos, causante del 30% de bajas laborales en España, con un coste anual de 80.000€ a la empresa. La fatiga crónica, la falta de eficacia, depresión o insomnio son algunas de las alteraciones que también pueden sufrir los empleados que no son capaces de conciliar ambos ámbitos de su vida.

Por todo esto y mucho más la nueva gestión de personas es necesaria en todas las organizaciones que quieran crecer y ser competitivas. Es totalmente necesario modernizar procesos, no solo digitalmente, sino también en la gestión del activo más importante de una organización, los trabajadores.