El plan de Internacionalización: Cómo y por qué diseñarlo

Una actitud proactiva no es suficiente para abordar los mercados internacionales. También es necesario conocer y aplicar la metodología idónea para emprender el camino hacia los mercados exteriores. Es este artículo se fundamentan las razones para ello y se delinean los elementos clave de un plan estratégico de internacionalización.

Las empresas que emprenden el camino de la internacionalización dan, muy a menudo, palos de ciego a la caza y captura de oportunidades en el exterior. No quieren desperdiciar ninguna oportunidad y frecuentemente se dejan llevar por sus intuiciones a la hora de tomar decisiones en este ámbito. Pero llega un momento en el que ven que por ahí no llegan a ningún sitio y entonces deciden detenerse, pensar y centrar el tiro, no sin antes haber invertido mucho tiempo y dinero con escasos resultados prácticos.

¿Por qué hay tan pocas empresas que tengan un éxito real en los mercados exteriores, como destaca en un estudio de 2013 el Instituto Español de Comercio Exterior?

Hay algunos casos en los que ciertas empresas han obtenido un resultado rápido y sin esfuerzo en su andadura internacional. Entre otros factores que pueden haber colaborado para su éxito podríamos destacar:

- Disponían de un producto/servicio innovador para el que todavía había poca competencia, hasta que llega un momento en el que esta aparece y les borra del mercado, salvo que adopten una estrategia previa al respecto.

- Descubrieron un nicho internacional desabastecido o con una oferta poco competida en la que encontraron grandes margenes (situación que dura hasta que aparecen los competidores para "compartir el botín").

- Han tenido la oportunidad de encontrar un acceso priviliegiado al mercado. Pero es raro que con esto puedan consolidar el mercado exterior más allá de la oportunidad concreta.

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