HAZ CALLAR A ”LA CHARLATANA” Y DECÍDETE A CAMBIAR
Aprende a hablar en público y a comunicar con eficacia.
Paco Grau-Cursos de Hablar en Público
Publicado el jueves, 07 de diciembre de 2017 a las 18:10
Se acerca la Navidad y, tras ella, el Fin de Año. Y ante el comienzo de un nuevo año, 2018 (parece que fue hace nada el cambio de milenio y los que nacieron entonces ya serán mayores de edad) muchos nos plantearemos algún cambio más o menos importante en nuestra vida. Los clásicos son: adelgazar, ir al gimnasio con regularidad, aprender inglés, dejar de fumar… y, ¿por qué no?, aprender a hablar en público de una vez por todas, superando esos miedos y bloqueos, si los tenemos, y adquiriendo las destrezas necesarias para ser un buen comunicador, un buen orador, dirigiendo y expresando mis pensamientos a los demás con naturalidad, seguridad, confianza, elocuencia y capacidad de persuasión.
Pero, claro, para tomar esa decisión importante en tu vida, primero tienes que reconocer que tienes un problema. Debes reflexionar con calma y con sinceridad, sin engañarte a mí mismo, y darte cuenta de que tu forma de hablar en público no es la mejor para un profesional de tus características o de tu nivel. Cuando das una charla, cuando presentas una propuesta o un proyecto, cuando das una clase, cuando pronuncias un discurso o, simplemente, cuando hablas en una reunión o haces una pregunta a un conferenciante o a un profesor, reconócelo, no te sientes seguro; no confías en tu capacidad para construir un conjunto de frases que expresar con exactitud aquello que tienes en tu mente. Por tanto, prefieres permanecer callado, perdiendo así una excelente ocasión para adquirir confianza en ti mismo y, desde luego, para comunicar tus ideas a los demás. Reconocer esta realidad en tu vida es el punto de partida esencial para poder emprender el cambio necesario.
El problema de muchos profesionales es que ni siquiera reflexionan sobre todo esto. Y, si lo hacen, se engañan a sí mismos pensando que ya están bien como están, que no lo hacen tan mal, o incluso piensan que lo hacen muy bien, sólo por el hecho de que llevan años dando clases, o dando charlas o, en general, hablando en público. Y así, claro, con esos pensamientos extienden una capa de niebla sobre su situación real, lo que les dificulta enfrentarse a ella con crudeza y sentido de la realidad. Es una auténtica lástima que su falta de sinceridad con ellos mismos les impida mejorar en su vida. Porque, de eso no hay ninguna duda, aprender a comunicar con eficacia al hablar en público les otorgaría un plus profesional del que muchos de sus competidores carecen. Y creo que sé de lo que hablo, después de haber formado en estas habilidades a cerca de 10.000 profesionales durante los últimos veintitrés años.
Por tanto, lo que debe hacer quien se decida de verdad a cambiar y mejorar esta faceta de su vida, tan importante al menos que ir al gimnasio para mejorar su cuerpo, es preocuparse por ir al gimnasio mental para mejorar su actitud y sus conocimientos para ser capaz de hacer un buen uso de la oratoria y conseguir brillar cada vez que toma la palabra para dirigirse a los demás.
Quien quiera mejorar en esta materia tan esencial, debe ser consciente de sus carencias y de sus necesidades, finarse un objetivo, una meta: ser un buen orador, darse cuenta de los pensamientos negativos que le impiden avanzar en ese sentido, expulsarlos de su cabeza, y buscar el camino que le conduzca a la consecución de ese objetivo. A todos se nos generan pensamientos limitantes que nos impiden tomar decisiones positivas que nos harán crecer interiormente. Es esa voz interior negativa a la que Susan Jeffers llama “la charlatana”. Jeffers, en su libro “Aunque le dé miedo, hágalo igual”, repite una y otra vez: “¡Haga callar a la charlatana!”. Porque, si no la haces callar no conseguirás tomar decisiones positivas y generadoras de crecimiento.
07/12/2017 18:10 | pacograu